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LA BANDA ANCHA PROPICIA EL ÉXITO DE LA RADIO A LA CARTA
Mercè Molist
Primero fue Orkut y las "redes sociales", después Flickr y el
"intercambio social de fotos". Ahora triunfa la "música social",
con servicios como Last.fm, Pandora o iRate, que permiten hacerse una
emisora de radio a la carta. Miles de internautas se están
uniendo a la fiesta, que ha crecido por el boca a boca, siguiendo la
expansión de las conexiones de banda ancha.
El empresario japonés afincando en Estados Unidos, Joi Ito,
ídolo de los "webloggers" y visionario de la red, anunciaba
recientemente que había comprado acciones de Last.fm: "De
momento, no quería hacer nuevas inversiones, pero esta es una
situación excepcional, con una compañía que tiene
muchos "partners" potenciales en EEUU y un gran mercado en
Japón".
Joi Ito lleva años siguiendo la evolución de Last.fm y
sabe de qué habla. Este servicio, como la mayoría de
radios a la carta, no ha nacido hoy sinó en Navidad de 2002, en
Londres. Poco a poco ha subyugado a los melómanos y, aunque no
hay datos oficiales sobre números de usuarios, lo mucho y bien
que se habla de Last.fm hace pensar que sean miles.
Para usar este servicio, hay que descargar un plug-in compatible con
los reproductores de música más populares, como Winamp
(Windows) o Rhythmbox (Linux). Algunos, como AmaroK, lo llevan de
serie. Cada vez que el usuario escucha una canción de su
discoteca personal, el plug-in envía la información a
Last.fm, que incluye el tema en su lista de preferencias.
Cada usuario tiene una web propia en Last.fm, donde se publica esta
información, de forma que es posible saber qué tema
está escuchando en un determinado momento o ver
estadísticas de los grupos que más le gustan. Esta lista
de canciones preferidas constituye su emisora de radio personal, a la
que puede conectarse cualquier usuario de Last.fm, para escuchar juntos
lo mismo, o crear grupos.
Además del plug-in, hay que instalar un pequeño
reproductor en el ordenador, para escuchar las emisoras personales de
los amigos o los temas que envía Last.fm a partir de nuestras
preferencias. El reproductor tiene un buscador donde se introduce el
nombre de un grupo musical y busca canciones de bandas parecidas. El
usuario puede marcar las que le gustan o no, para afinar más la
selección.
A partir de las preferencias recopiladas, Last.fm recomienda
también lecturas y gente con gustos parecidos. El usuario no
descarga la música en su ordenador, sólo la escucha,
mediante "streaming". Aunque la mayoría de grupos son
comerciales, los independientes también puede ofrecer su
música a través de Last.fm, que paga a todos derechos de
autor, a través de la MCPS-PRS Alliance británica.
El registro es gratis y existe una versión de pago, 3
dólares al mes, con contenidos extra y sin publicidad. Junto a
las suscripciones, el negocio se entrevee en la cláusula de
privacidad: "Nos reservamos el derecho de vender o licenciar los datos
de la música escuchada para su uso comercial, aunque nunca vamos
a vender información personal que pueda llevar a un usuario
específico".
Pandora es otro servicio que comparte protagonismo con Last.fm.
Nació en 2005 y no es necesario instalar ningún programa:
pueden escucharse las canciones en su web, mediante la
tecnología Flash. La novedad de Pandora es que no recomienda la
música a partir de grupos parecidos, como Last.fm, sinó
que usa parámetros más detallados, como el tipo de
melodía, ritmo, instrumentos, letras, etc.
La clave de Pandora es el "Music Genome Project", una base de datos
resultado de seis años clasificando temas de más de
10.000 artistas, según sus cualidades y atributos, lo que
permite una precisión nunca vista. Se introduce el nombre de un
grupo, por ejemplo "The Rolling Stones", y Pandora busca bandas
parecidas por sus "cualidades ácidas de rock, influencias de
blues, melodías repetitivas, improvisación y tonalidades
graves".
A partir de aquí, el usuario va marcando las canciones que le
gustan. También puede escuchar las preferidas de sus amigos, o
mandarles las suyas, o comprar los álbumes en iTunes y Amazon.
El registro es gratuito. Por 4 euros mensuales se ofrece sin
publicidad. Según Pandora, tienen más de 40.000 CDs,
aunque los usuarios se quejan de su poca oferta de música
española.
Otro popular y veterano servicio es iRate, con 50.000 canciones y
28.000 usuarios. Su versión 0.1 apareció en 2003. Precisa
de la instalación de un programa en el ordenador del usuario,
que envía las sugerencias de canciones y toma nota de las que le
gustan o no. iRate coteja estas preferencias con las de internautas que
tengan gustos semejantes y sugiere otras canciones que también
gusten a aquellos.
La diferencia de iRate con los otros servicios es que no se escucha la
música en "streaming", sinó que el usuario la descarga de
las webs de los artistas. La música ofrecida, por tanto, no es
comercial sinó de grupos independientes que no quieren cobrar
derechos de autor o usan una licencia libre. Otra diferencia con el
resto es que iRate no es un negocio sinó obra de voluntarios.
También Jamendo, el único con web en español
aunque sito en Luxemburgo, se basa en la música libre. Ofrece
6.500 canciones "copyleft". Sus 13.000 usuarios registrados pueden
escucharlas mediante "streaming" en la web o descargar el álbum
a través de las redes P2P BitTorrent y eDonkey2000. Jamendo
clasifica la música a partir de las opiniones de los usuarios,
el número de descargas, comentarios o donaciones a los artistas,
y usa también el sistema iRate.
Estos sitios son sólo una muestra de la ola de radio a la carta
por Internet. Hay cada vez más y más visitados, como el
veterano Launchcast de Yahoo!, con una interfície web como
Pandora, o el más sencillo Musicstrands, con análisis
estadísticos sobre las canciones y grupos preferidos por sus
usuarios. Gracias a la popularización de la banda ancha, ha
llegado su hora.
"LAST.FM ME OFRECE SUGERENCIAS MUSICALES IMPAGABLES"
Mercè Molist
Benjamí Villoslada es un programador informático de
Mallorca que usa Last.fm desde que nació este servicio. Lo
combina con el reproductor de música Amarok, un programa libre
que envía a Last.fm las nuevas canciones que Villoslada
introduce en su ordenador: "A cambio, Last.fm me hace sugerencias
musicales impagables, de gente con gustos similares a los míos",
explica.
Villoslada, como todos los usuarios del servicio, tiene una
página en Last.fm donde se detallan los temas que está
escuchando en cada momento, sus canciones y estilos preferidos. El
sistema le informa de otras personas con gustos parecidos y el
programador disfruta curioseando en las listas de canciones de sus
"vecinos" musicales: "Gracias a ellos, he descubierto grupos de los que
jamás había oído hablar".
Cuando se cansa de su repertorio, Last.fm le permite escuchar
música aleatoria, como una emisora de radio, pero adaptada a su
gusto personal: "Es mejor que las radios de toda la vida porque, si me
envía un tema que no me gusta, puedo eliminarlo y el sistema
toma nota, para no ponérmelo nunca más".
Villoslada se ha convertido en un virtuoso de Last.fm: "Con Amarok,
puedes hacer una "playlist" con música de un disco tuyo y,
después, añadirle temas de una emisora de Last.fm". Y le
encanta: "Le dices a Amarok que vaya reproduciendo canciones, en
sintonía con el estilo de las primeras que escuchas, y el
programa consulta a Last.fm, a partir de las que hay disponibles en tu
colección y los gustos de la comunidad. Basta escoger un par de
piezas para tener toda una tarde de música programada de forma
inteligente".
Web de Joi Ito en Last.fm
http://www.last.fm/user/joi
Last.fm
http://www.last.fm
Pandora
http://www.pandora.com
iRate
http://www.irateradio.com
Jamendo
http://www.jamendo.com
Musicstrands
http://musicstrands.com
Yahoo!Launchcast
http://music.yahoo.com/launchcast
Copyright 2006 Mercè Molist.
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is permitted in any digital and no commercial medium, provided this
notice is preserved.
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