23/05/2005
18:16
Savage:
El tercer hombre
"Si buscas los tres pies al gato, al final
los encuentras"
Jordi Murgó, más conocido en el "under" como Savage, es
una leyenda del hacking hispano. Testimonio de una época, cuando
los hackers aprendían a ser hackers, fue miembro de un grupo,
Los Apòstols, también legendario. Savage es un
gurú, un hacker puro (un puro "coder"), accesible como pocos.
Campechano, vital, hoy le absorbe su propia empresa, donde el hacker se
ha convertido en mercenario. Pero en su núcleo sigue brillando
esa luz blanca...
-Cuéntame sobre ti.
-Tengo 36 años, estoy casado, con dos hijos de 10 y 6
años, que utilizan Linux en el escritorio desde hace unos
años.
-Eres hijo de campesinos. Siempre he pensado que son los hackers
primigenios.
-Son muy apañados, hacemos de la necesidad una virtud y
aprendemos a hacer de McGiver. La falta de recursos propicia soluciones
imaginativas.
-¿Este origen tiene algo que ver con tu camino?
-Absolutamente. Como todos los críos de la zona rural donde
vivía, iba en bicicleta, hacía escopetas para disparar
gomas con pinzas de tender la ropa, nos hacíamos escondites,
jugábamos a guerrillas tirándonos peras y manzanas, nos
comíamos las fresas de los vecinos. Siempre he sido curioso y en
casa no quedaba trasto por desmontar. Había un juguete que me
marcó: Eletro L.
-¿Cuesta sudor y lágrimas ser un gurú?
-No, si no eres obsesivo. Las cosas que te gustan de verdad son un
juego. Lo ha sufrido más la gente de mi entorno. Es
difícil convivir con alguien que no puede evitar poner la neura
por encima del resto de cosas.
-¿Alegrías?
-Cualquier reto con suficiente dificultad me reporta una gran
satisfacción cuando lo consigo. No sé si ver por primera
vez la luz de "Carrier Detect" en el módem me produjo más
satisfacción que deducir la primera combinación de
login/passwd para entrar en un Unix conectado a la red X25 (era
carmen/carmen), o poner en marcha un programa que parece descabellado y
ver que funciona. Todo produce una sobredosis de adrenalina
indescriptible.
-¿Cuántos SO y lenguajes informáticos dominas?
-Ahora, sólo Linux, pero puedo convivir con cualquier Unix
clásico. Conozco Windows XP y NT, y Mac OS/X superficialmente.
Aunque años atrás utilicé muchas cosas, en los
últimos 5 años he programado en C, Java, PHP, Pike, Perl,
JavaScript, ActionScript, PIC-Assembler y AVR-Assembler.
-¿Algún handycap?
-Mi inglés es poco fluido. Y acabar la carrera de
Informática.
-¿Cuándo y dónde te conectaste por primera vez?
-En 1987, con un módem que me regaló alguien de
Telefónica, a una BBS de Vilanova i la Geltrú. Estaba
abandonada. La gente se conectaba, dejaba mensajes, pero no
había un responsable. Después, a la BBS Libro de Arena,
en Barcelona y, a partir de aquí, había 10 o 15 en
España en aquel momento, las visitas todas y al final te metes
en una. Entré en Fidonet. Había salido RedBBS pero me
gustaba más Fidonet, por el software, y al final intentamos que
todo fuese una misma cosa, hicimos una red bastante maja, en Catalunya.
-¿Visitabas también BBS de fuera del estado?
-Sí, por toda Europa, buscando áreas de mensajes
interesantes, sobre todo en Inglaterra y Francia, porque podías
entenderlo. Para temas de software de MSX, Japón. Y para temas
de hacking, las BBS americanas. Al final, era una fortuna cada mes en
llamadas telefónicas, cuando tocaba pagar.
-¿Hacías phreaking?
-Hombre, se tenía que hacer. Si no, no podías mantener
aquello. Hasta el 92, era muy fácil. Las primeras llamadas
pagando que haces a fuera, lo primero que te bajas son los ficheros de
cómo llamar gratis. Y, con la información que sacas de
EEUU, intentas averiguar qué puedes hacer aquí, no es
exactamente igual, pero probando mucho y con un poco de
información de dentro de Telefónica, que nadie sabe
cómo la pides y tal... Después, a esperar la factura a
los dos meses, para saber si la cosa ha funcionado. Y no era
fácil, porque entonces no llegaban detalladas.
-¿Habías construído blueboxes?
-Claro. La gente de Apòstols, un poco hicimos grupo por el tema
del blueboxing, para poder seguir con el vicio.
-¿Intercambiábais información?
-Sí. Formas de llamar, algún vecino, te enganchabas donde
podías, colgabas cables en las fachadas... Pero después
intentas hacer algo más estable, que no tengas que ir
jugándotela, porque sabes de conocidos a quienes han acabado
cogiendo. Tienes que hacer algo más limpio.
-Y lo más limpio es...
-El blueboxing, en aquel momento. Enviar tonos a la línea para
que las centrales remotas piensen que eres una central y no un usuario
y hagan caso de tus órdenes: ahora, esta llamada que era
gratis, córtala y me envías a EEUU.
-Los programas que hacías para MSX fueron usados mundialmente,
¿cómo los difundías?
-Entonces no había Internet y lo que hacía la gente era
enviarse sobres llenos de disquetes los unos a los otros. Se anunciaban
a través de revistas: intercambio programas MSX o PC. Mis
programas iban saliendo en revistas, la gente tenía amigos que
llegaban a las BBS desde PC y les decían: para MSX
también hay un programa, etc.
-Tú, entonces, no tenías PC.
-Cuando hice el primer programa, no tenía ni disquetera. No
podía bajar ficheros, era sólo para emular la terminal de
conexión.
-A los 18 años entras a trabajar en Telefónica.
-Casualidades de la vida. Estaba estudiando y apuntado en el paro. Me
hicieron una prueba, un psicotécnico, no era ni una prueba de
aptitud, y nos cogieron a prácticamente todos los que
veníamos de electrónica.
-¿Qué te llevas de la experiencia en Telefónica?
-Muchos amigos. El ambiente era similar al de hoy en el software libre:
cuando eres técnico de una central, estás solo ante un
monstruo que tiene millones de contactos, centenares de miles de
relés. Estás tú solo y un armario con el
código fuente, los mapas de toda la central. Si hay una
avería, tienes que arreglarlo tú, no hay nadie. Es como
los inicios del soft libre: aquí tienes el programa y el
código fuente, si falla algo, coge el código y
arréglalo. La gente compartía las experiencias, posibles
soluciones: si pasa esto, pon un palillo entre un contacto y otro.
Además, estuve unos años de sindicalista y fue muy
divertido.
-¿Cuándo te pones el apodo Savage?
-Al final de Apòstols, porque no me gustaba el nombre que
tenía allí.
-¿Qué nombre tenías?
-"El tercero", porque era el tercer apóstol. Primero fueron dos
chavales de Barcelona y yo era el tercero.
-El grupo duró poco, sólo del 89 al 91...
-Servía para hacer hacking en sistemas operativos que no
tenías en casa. Pero el año 90 empieza a haber Unix
disponibles y el 92 tienes Linux y FreeBSD en todas las BBS. Entonces,
ya no necesitas jugarte el tipo y estar conectado de noche. Lo
hacías porque te lo pasabas bien, querías conocer
más cosas, hacías programas, probabas cosas. En el
momento que puedes hacerlo en casa... Y en poco tiempo tienes Internet.
Ya no hay tanta necesidad de acceder ilegalmente a nada, pierde un poco
el sentido. Llamar gratis también se complica: el 92, se
digitalizó la red que interconectaba la red nacional y queda
registrado el origen y destino de las llamadas, es más
fácil seguirte.
-¿Qué gracia tenía entrar en las redes X25?
-Primero, no sabíamos llamar gratis y, si querías
contactar con gente un poco "underground", o llamabas directamente a
BBS americanas o alemanas o no tenías otra salida. Pero, a
través de una llamada local, tenías acceso a X25. Lo
único que necesitabas era un login y un password y, a partir de
aquí, podías saltar a los chats franceses de la red
Minitel. Primero, accedías a través de las universidades
y, en los chats, conseguías métodos para acceder a
cuentas directas de X25. Aprendías a hacer hacking social, a
llamar por la noche a operadores pidiéndoles directamente el
login y password.
-¿Y cuando los tenías?
-Entonces, utilizabas las redes X25 para seguir conectado con tus
compañeros, básicamente a través de un chat
francés que se llamaba QSD, un chat gay de la red Minitel. Los
hackers de toda Europa, algunos americanos, entrábamos por la
puerta de atrás, por la red internacional X25, y la primera
pregunta que nos hacían en el chat era: "¿Eres hacker o
gay?". A partir de aquí, ibas encontrando a gente, te pasaban
otros chats, pero el punto de encuentro era QSD, porque las conexiones
X25 tenían un límite de conexiones simultáneas y
el de QSD era el más grande de todos, nunca comunicaba. En
cambio, los chats que podíamos montar en universidades o
sistemas que asaltábamos tenían un número limitado
de conexiones simultáneas y lo montabas para 4 o 5 amigos.
-O sea: os conectábais para conseguir información para
seguiros conectando.
-Sí, es la droga, la afición. Primero, porque
habíamos visto la película "Juegos de Guerra" y
también porque es divertido y, si consigues un Unix, puedes
montar un chat donde ir con los amigos cuando los otros están
llenos. Además, quedaba muy bien decir que habías montado
un chat.
-¿Entrábais también en redes de EEUU?
-Igual. Las redes X25 estaban unidas. Los nodos de entrada de X25
americanos estaban mal configurados y, si entrabas por detrás,
tenías un módem con una conexión telefónica
al otro lado y lo podías usar para conectar a donde quisieras
del mundo. Sólo necesitabas la lista de nodos, que era
fácil de conseguir: cuando entrabas en una universidad
americana, mirabas quién estaba conectado y te salía una
lista con el número identificador de la puerta de entrada a la
red que había utilizado. Si conectabas con aquel identificador,
cuando el usuario no estaba, algunos operadores lo tenían mal
montado y, haciendo poca cosa, AT OK, ya tenías el módem
allí. Circulaban listas con cuentas que todo el mundo
conocía, una de ellas era RMS, la de Stallman, en una
máquina del MIT, sin password. Pero una cuenta que siempre
está allí no tiene mucha gracia, no la puedes
intercambiar porque todos la tienen, como un cromo repetido.
-¿Entrasteis en el ordenador del libro "El Huevo del Cuco"?
-MITRE era un suministrador del ejército norteamericano que
estaba muy bien comunicado con todas las redes activas entonces.
Había un menú de entrada para acceder a un servicio de
directorio de teléfonos, que podías abortar apretando una
secuencia: ctrl i ctrl i ctrl i. Si lo hacías bien, abortabas el
menú, salías a una shell y desde allá
podías conectar a cualquier sitio. De todas formas,
también era conocido por casi todo el mundo. Durante muchos
años todos los hackers entraban por allí.
-¿Y por qué sólo pillaron a los alemanes?
-Porque buscaban algo que el resto no buscábamos. El resto
sólo buscábamos máquinas para divertirnos, para ir
haciendo saltitos, dar la vuelta a la Tierra a nivel de comunicaciones:
llamo por teléfono gratis hasta Argentina, para entrar en la red
X25 de Argentina y hacerla conectar a Estados Unidos por X25, para
salir por un módem para conectarte a la BBS de un amigo de
Barcelona. Dabas la vuelta para divertirte, aunque no servía
para nada, un montón de basura porque había muchos
módems sin corrección de errores.
-¿No tenías miedo?
-Sí, claro. Miedo porque trabajaba en Telefónica, miedo
porque a veces habías entrado en sitios donde no deberías
haber entrado... Una noche, en casa de un amigo, estuvimos toda la
noche haciendo hacking, entramos en la Universitat Politècnica
de Catalunya, nos paseamos por todas partes. No habíamos dormido
y, por la mañana, a primera hora, llamaron a la puerta. Eran
tres señores, uno venía a levantar acta y dos eran de la
policía judicial. Además, la noche anterior
habíamos tenido un pequeño acojone porque se nos
había quedado una llamada enganchada y no se soltaba, nos
cogió la paranoia, enchufamos 220 a la línea de
teléfono para hacerla saltar y saltó. Pero claro. Cuando
a las 9 de la mañana alguien llama a la puerta... nos cagamos.
-¿Y?
-Al final, no tenía nada que ver. Se llevaron el ordenador, con
todos los logs de la sesión de la noche, todo, los disquetes, y
fue porque el compañero había anunciado en una revista
que intercambiaba o vendía programas de PC y le había
vendido un dBase III a uno de la judicial. El chaval no ha vuelto a ver
el PC.
-Cuéntame sobre el grupo portugués ToXyN.
-Buenos chicos. Yo había montado el tema de Internet en
LleidaNet, en 1996. Los ToXyN solían montar concursillos entre
ellos y entonces era asaltar sitios .es. Intentaron hackear un servidor
de FTP de LleidaNet, para saltar desde allí. Lo estuve mirando y
me pareció sofisticada la forma como la habían hecho,
miré las IPs, intenté hacer un talk root@ y me
salió un tío. Nos hicimos amigos. Después hicimos
cosas.
-¿Como montar la primera campaña hacktivista conocida en
la historia?
-Contra el gobierno de Indonesia. Colaboré haciendo software y
hackeando algunas máquinas. Hice exploits a medida para la
campaña. Era ir mirando máquina a máquina,
qué tenía y hacer los exploits. Entonces, no circulaban
exploits libremente por Internet como ahora, te los tenías que
hacer. Hicimos máquinas importantes, de ministerios de
allí, exploits para AIX, BSD, Linux, Solaris... Hicimos
prácticamente de todo. También hice What OS, que
detectaba 5 o 6 SO y que después sería QueSO. Era para
montar scripts de búsqueda de todos los dominios .id. Dominio
que había, buscábamos la máquina www, la ftp, la
mail y la news y intentábamos atacar las cuatro. Montamos tantos
ataques automatizados como pudimos. Y, cuando veías algún
positivo, intentabas acabarlo manualmente. Hicimos miles de
máquinas.
-¡A mano!
-Algunas eran scripts ya preparados. Cuando tienes el exploit hecho y
nadie conoce la vulnerabilidad, es realmente fácil.
-A pesar de estas historias de hacking, en tu kernel eres un "coder".
-Sí.
-¿Has hecho virus?
-Para PC, no. Para MSX, uno. Para dedicarte a esto tienes que dominar
bien el Assembler y yo dominaba el Assembler para CPUs de 8 bits. Pero
accedí al mundo del PC programando ya en C. Y tampoco me ha
llamado nunca la atención.
-¿Por implicaciones morales?
-Hay partes de algunos virus que son inmorales. Por ejemplo, un amigo
hizo el AntiTel (AntiTelefónica) y tenía toda la
razón de ser, lo que pasa es que hacer que te formatee el disco
duro ya era pasarse. Aunque entiendo que está bien que hagas la
broma: de vez en cuando hacía salir un cartelito de Telefonica
Te Tima, que en aquel momento era verdad.
-Los programas por los que más se te conoce son QueSO y NePED...
-QueSO es el primero de este estilo, de reconocer sistemas operativos,
antes de Nmap, que coge ideas y así lo reconoce en su
documentación. Básicamente, es el primer programa que
separa la lógica de análisis del sistema operativo de la
base de datos de reconocimiento de sistemas operativos, nada
más. No es tan meritorio, eran técnicas conocidas de
muchos años, no inventé nada, sólo que a nadie se
le había ocurrido.
-¿Y NePED?
-Fue una apuesta, un pique tomando cervezas: no se pueden detectar
sniffers con un programa, no lo conseguirás, a que sí, a
que no. Si buscas los tres pies al gato, al final los encuentras. Y
funcionó.
-¿Fueron los últimos programas de seguridad que
escribiste?
-Tampoco es que me dedicase a esto. Fue para hacer la versión
Internet de lo que hacía cuando era más joven. Pero para
mi la seguridad es bastante aburrida.
-¿Por qué?
-Es como un juego del gato que persigue al ratón, me parece sin
sentido. Si eres administrador, te acabarán entrando y la
mayoría de veces no será culpa tuya. Es un trabajo donde
sabes que, por mucho o poco que te esfuerces, acabarás
fracasando. Tiene que ser muy triste, para un tío que tiene 300
máquinas en un hosting, que nunca podrá sentirse un
administrador de sistemas de puta madre, porque cada semana debe tener
40 incidencias lo menos. Es mejor buscar algo que te aporte
algún tipo de recompensa.
-¿Y hacer de intruso?
-Cuando tienes dos hijos, estás casado, pagando una hipoteca, lo
que no te planteas es irte dedicando a hacer de salteador de la red,
porque sabes cómo acabarás, has visto cómo han
acabado los que creían que no pasaría nada.
-¿A quién quieres más, a Richard Stallman o a Eric
S. Raymond?
-Conozco personalmente a Stallman, a Raymond no, pero hay muchas cosas
de Stallman con las que no coincido, me gusta más la postura
liberal de Raymond que el libertinaje obligado, te obligo a ser libre,
de Stallman. Lo que hace Stallman es una imposición, me
recuerda, aunque la comparación es odiosa, la postura del Papa,
que dice que está en contra del imperio de la relatividad. Pues
a Stallman le pasa un poco esto: las cosas son así porque yo las
digo, las mires por donde las mires, y no te permite mirarlas de otra
forma. Yo he cambiado muchas veces en la vida y no entiendo a alguien
que tiene tan claro que esto es la verdad absoluta y no quiere escuchar
a nadie: esto es así porque Dios lo dice.
-¿Cómo ves el soft libre?
-Está en un buen momento, a pesar de problemas, putadas,
campañas. No hay manera de pararlo. Soy bastante optimista.
Somos muchos y, además, hay pasta detrás. Ahora no se
hace sólo porque hay mucha gente con muchas ganas, sinó
que además hay gente que paga a gente que tiene muchas ganas.
Hay personas que están trabajando en su casa, haciendo soft
libre para Novell, y les pagan cada mes. Hace unos años, esto no
pasaba.
-Cierto.
-Ahora, se está trabajando en Mono porque, si Microsoft triunfa,
aunque no lo pondría en condicional, porque siempre triunfa,
cuando MS triunfe en este tema, nosotros también tengamos puesto
un pie allí, es imprescindible. Esto era impensable hace
años. Estamos obligando a MS a que toda su estrategia de
marketing vaya orientada a decir que lo hacen mejor que nosotros.
Ahora, sólo tienen un competidor y es el soft libre.
-¿Qué te gusta de la Internet de hoy?
-La malla de weblogs, forman redes de informaciones y opiniones muy
relacionadas entre sí, que se encadenan las unas a las otras y
se van retroalimentando. Me gusta lo que significan como concepto, como
neuronas, unidades de información unidas a otras que permiten
que los que tocamos un tema concreto nos enteremos de todo. Es una
forma mucho más dinámica de navegar que yendo al buscador.
-¿Tu weblog preferido?
-Miro Barrapunto. Y Fukowski me divierte mucho.
-¿Los hackers de hoy son tan buenos como tú?
-Seguro que los hay mejores. Es un tema de estar al día, nada
más. Además, es mucho más fácil ser o
parecer un buen hacker hoy porque circula más la
información. En los 90, no circulaba una mierda. Si
querías un troyano, te lo tenías que hacer, no los
encontrabas en BBS ni tenías Google. Ahora, tienes el
código fuente de varios Unix colgados en Internet, por si
quieres hacer guarradas. La información sobre qué
programas son vulnerables, los exploits, siguen circulando, a pesar de
los gobiernos. Si pones mi dirección antigua de Apòstols
en un buscador, todo lo que te saldrá prácticamente
serán exploits míos.
-O sea, que lo tienen fácil.
-Sí.
-Abuelete, ¿algún consejo para estos hackers?
-Que no hagan el tonto en su país ni en países donde haya
extradición directa.
-¿Te gustaría que tus hijos fuesen hackers?
-No me importaría que programasen, pero cada vez está
más peludo hacer el tonto, la policía está
preparada para no perdonar ni una. Por tanto, de hacking les
diría que no.
-¿Qué es un gurú?
-Una palabra en sánscrito que significa "el que espanta la
niebla".
Mercè Molist
LA
MEMORIA DEL GURÚ
"Empecé a los 14 años, aprendiendo informática de
compañeros de 4º y 5º de FP. Una cosa llevó a
la otra y aprendí microprocesadores por mi cuenta, lo
sabía casi todo de la familia 6502. En mi escuela tenían
unos equipos con 6502, programables en BASIC y Assembler, en aquella
época sólo conocía el Assembler. Las makinas se
llamaban Acorn-ATOM. Con la pasta de recoger fruta me compré un
ordenador HitBit de Sony (con cassette y 16K de RAM) el año
1984, porque en la escuela no me dejaban estar más horas en el
aula de informática.
Después curré haciendo el mantenimiento eléctrico
y de automatismos de la escuela, por las mañanas, por la tarde a
clase. Con la pasta compré impresora, ampliación de
memoria a 64Ks, algunos juegos de Konami... y conseguí
¡¡UN MODEM pirata!!! Peaso módem a 300 bauds. Menudo
problema: ¿cómo coño se conecta un módem a
mi MSX? Me pedí un RS232 de importación.
Fantástico, ya tenía módem, RS232 y en una revista
había visto un número de teléfono de un BBS. Hice
4 líneas en BASIC para montar un mini-programa de
comunicaciones, que me permitía activar y desactivar la captura
de sesión hacia la impresora.
1988. Entro a currar en Telefónica (en prácticas). Poca
pasta, pero me compré el MSX2, ¡¡con disketera y 80
columnas de texto!!
Me hice una versión mejor del programa de comunicaciones, que me
permitía bajar y subir ficheros con protocolo X-MODEM. El
programa tuvo mucho éxito en el mundo MSX, se llamaba COMS3.
Conseguí un compilador de C (limitadísimo) para CPM, lo
adapté ligeramente a MSX-DOS, y aprendí C. El primer
programa fue el COMS4, hecho en C y ASM de Z80 (también era
libre). Se utilizó durante mucho tiempo a nivel mundial.
1989. Estuve en una empresa de informática local, monté
un sistema anticopia basado en hardware.
1989-2000. Vuelvo a Telefónica. Hasta Julio de 2000 hago de
administrador de sistemas (Theos, IBM S/1, Banyan, SunOS, HP/UX, AIX,
Solaris, Linux...) y de programador de cosas relacionadas con sistemas
y comunicaciones.
1989-1990. En aquella época, rondaba las redes X25, buscando
Unixes, Vaxens y chats multiusuario. Conocí a gente muy
simpática, unos se llamaban Glaucoma porque atacaban la red
IRIS. Empezamos a hacer el idiota juntos, llamando gratis, entrando por
el morro a X25, saliendo por out-dials de compañías
americanas. Al final, alguien dijo que éramos un grupo y
podíamos llamarnos Los Apòstols. Éramos 2 de BCN,
yo de Lleida, uno de Zaragoza, uno de Alicante y uno de Tenerife. Si
entrábamos en un Unix, teníamos una perfecta
imitación del login que nos permitía utilizar cualquier
cuenta del sistema con el password "joshua!" (¿podríamos
decir que ya era un rootkit? :) En los VAXes, no podíamos
sustituir el LOGIN.EXE, así que hacíamos usuarios que
pareciesen procesos del sistema (SYS$PROCESS, por ejemplo) pero con
privilegios.
1990. Compré un PC-XT de segunda mano con 640Kb de RAM y 10Mb de
disco duro. Allí instalé mi primera BBS: MSX-Access.
Seguí diseñando cosas para MSX y utilidades.
Adapté el compilador libre de C para 8 bits (micro C) a Z80
optimizado. Mucha gente lo utilizaba. Fuí ampliando el
módem: 2400, 2400MNP y ¡¡14.400!! Pagué
140.000 pesetas por él.
1991. Podemos decir que Apòstols ya no existe.
1992. Me caso, monto LleidaNet, me compro más PCs, abandono el
MSX y me dedico al Unix (Coherent 286, Coherent 386 y LINUX). En
aquella época, hice cosas bastante interesantes, recuerdo una
librería libre y en código fuente, para C++, que te
permitía multitask cooperativo desde MS-DOS. Algunas cosas para
automatizar tareas de Fidonet (era coordinador de Catalunya).
1994. Montamos nuestro primer webserver, un CERN, sobre Linux, en la
Universitat de Lleida, conectada a la Universitat Politècnica de
Catalunya a 9600.
1995. Montamos Internet en LleidaNet y nos hacemos ISP, todo bajo
Linux. Sólo tenía tiempo de codificar para nuestros
clientes.
1996. Registramos Apostols.org con Rampa de Encomix. Conozco a los
chicos de ToXyN mientras intentaban hackear algunas máquinas de
LleidaNet. Les hago un talk root@ip_del_hacker y nos hicimos
coleguillas. Me reintroduje en el mundo de la (in)seguridad.
1997. El tema ISP ya no me absorbe y me dedico a codificar de nuevo.
Algunas cosas impublicables, que utilizaron los amigos de ToXyN en la
campaña contra Indonesia, por la Independencia de Timor del
Este. Hice algún módulo para Roxen, bajo GPL, y bastantes
aportaciones al código del webserver.
1998. Me dedico a hacer cosas relacionadas con el IRC, hasta que domino
bastante bien el sistema. Hago QueSO y NePED, sigo aportando cosas
allí donde puedo... A final de año se provoca la
escisión de Arrakis a IRC-Hispano y, en una noche, montamos lo
que ya tenía funcionando en la red IRC de DarkNet. Monto
Linux.Apostols.Org.
1999. Todo el año dedicado a cosas del IRC-Hispano: services,
nuevos bots, juegos online, mantenimiento y mejoras en el ircd. Alan
Cox me acepta un pequeño patch para el kernel de Linux, no sabes
lo ke mola que salga tu nombre en el kernel :)
1 julio de 2000. Dejo Telefónica, LleidaNet y dimito de
Admin/Oper/Devel del Hispano."
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